Observamos y analizamos la actividad del mercado para detectar y prevenir prácticas anticompetitivas que puedan dañar la competencia y afectar a los consumidores.
Establecemos normas para garantizar una competencia efectiva entre empresas de distintos sectores económicos, con especial atención a la protección del consumidor.
Finalizado el proceso, la CNMC publicará un Estudio que incluirá una serie de recomendaciones para garantizar una regulación procompetitiva y eficiente.